Todos los jugadores menos uno se colocan en un círculo amplio, el jugador que sobra se coloca en el centro. Todos los jugadores tienen 2 vidas menos el jugador central, que tiene tantas vidas como las de los demás sumadas. Los jugadores exteriores pueden entrar de uno en uno dentro del círculo y combatir contra el jugador central con las condiciones de que:
-Tras perder una vida se salen y esperan al menos otro combate antes de entrar.
-Una vez dentro no pueden salir.
Los jugadores que no estén dentro del círculo pueden atacar al jugador central si este se aproxima lo suficiente a ellos, siempre que no entren en el círculo.
Si un jugador exterior consigue derrotar al jugador central estos intercambian posiciones y se empieza de nuevo.
Si el jugador central logra derrotar a todos los jugadores exteriores gana la partida.
-Tras perder una vida se salen y esperan al menos otro combate antes de entrar.
-Una vez dentro no pueden salir.
Los jugadores que no estén dentro del círculo pueden atacar al jugador central si este se aproxima lo suficiente a ellos, siempre que no entren en el círculo.
Si un jugador exterior consigue derrotar al jugador central estos intercambian posiciones y se empieza de nuevo.
Si el jugador central logra derrotar a todos los jugadores exteriores gana la partida.